El presunto asesino del crimen de 'las gemelas asesinas': "Entre el cloroformo y los chispazos que mete eso quedará muy doblado"

La madrugada del 10 de julio de 2021, Pedro Fernández, de 55 años, se encontraba durmiendo en casa de su amiga íntima Dolores Vázquez. Alguien le golpeó fuertemente en la cabeza con una herramienta hasta acabar con su vida. El varón no falleció en el acto, puesto que tuvo margen de reacción, pero por poco tiempo. Se levantó aturdido por el golpe, logró salir al rellano del edificio, pero fue ahí cuando supuestamente su asesino lo remató a golpes. El ataque fue de tal virulencia que le causó la destrucción parcial de la masa encefálica y una hemorragia cerebral y facial.

Fueron los propios vecinos del edificio los que llamaron a la Policía tras escuchar los gritos, mirar por la mirilla y ver cómo una persona estaba golpeando a otra. Al llegar, los agentes se encontraron con el varón muerto y con las escaleras repletas de sangre. En uno de los inmuebles se encontraban tres personas. Una de ellas reconoció los hechos.

Los mensajes y audios de los teléfonos dieron un vuelco al caso

Tras la investigación y el volcado de los teléfonos, la policía encontró los mensajes y audios de WhatsApp que se intercambiaban entre ambos para, supuestamente, planear el crimen. "Entre el cloroformo y los chispazos que mete eso, quedará muy doblado", le escribía el presunto asesino a su pareja, una de las gemelas.

Lo que entonces consideraron tanto la Fiscalía como la acusación particular era que se trataba de un crimen planificado. Según estas dos partes, sería la propia Dolores quien planeó acabar con la vida de Pedro para lo que se ayudó de su hermana gemela, Pilar Vázquez, y del novio de ésta, Isaac, a quien se ha declarado autor material del homicidio. Ambos serán juzgados por estos hechos próximamente en la Audiencia de Barcelona. Dolores, a diferencia de Pilar e Isaac, espera la llegada de esa fecha pero en libertad.

La expareja de la víctima: "No entendemos como Dolores está libre"

Esta mañana, Marina, la expareja de la víctima, contaba en el programa Espejo Público, que no entiende cómo Dolores está en libertad, a diferencia de Pilar e Isaac. "Estamos toda la familia fatal. Él tiene seis hermanos que están sufriendo todo esto. No entendemos cómo una de las gemelas está en prisión y la otra en libertad. La han visto por ahí tan tranquila y manchando el nombre de mi exmarido diciendo que la maltrataba. Eso es mentira", aseguró Marina, que puso de manifiesto los problemas de Dolores con el alcohol.

En este sentido, la exmujer explicó que se divorciaron pero su relación era buena. "Estuve 24 años con él. Tenemos una hija en común y nos divorciamos por mutuo acuerdo, concretamente porque se acabó el amor", explicó Marina, quien añadió que Dolores llegó a tener celos de ella.

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