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DOS AÑOS DE VERSIONES CONTRADICTORIAS

¿Quién mató a Marta y dónde está su cuerpo?

El último día en la vida de Marta del Castillo fue el 24 de enero de 2009. La vieron en el portal de su casa esperando a unos amigos. Ahí se pierde su rastro. Han pasado dos años, cuatro declaraciones contradictorias, cinco búsquedas, cientos de concentraciones y manifestaciones, una familia destrozada y Marta no aparece.

En su primera versión, Miguel Carcaño, ex novio de Marta, declara que fueron a casa de su hermanastro en la calle León XIII donde se les unió 'el cuco'. Marta no quiso darle un beso a Miguel y ambos amigos, tras consumir estupefacientes, la mataron a golpes con un cenicero. Samuel Benítez, un amigo, y Francisco Javier, hermanastro de Carcaño, les ayudan a deshacerse del cadáver y a borrar pruebas. El cuerpo, dicen, está en el Guadalquivir. Más de doscientos efectivos de la Guardia Civil, rastrean el río en busca del cuerpo. No aparece.

En la segunda versión, Miguel Carcaño asegura que fue 'El Cuco' el que mató a Marta estrangulándola con un cable después de haberla violado los dos. Ahora, aseguran que el cuerpo lo tiraron a la basura. La Policía no se cree esta versión. Miguel la podía haber inventado para evitar el jurado popular, pero buscan el cuerpo durante 40 días en un vertedero de Sevilla sin resultados.

Miguel trata de suicidarse, pero no lo consigue y será juzgado por un jurado popular, así que retoma su primera versión, la del golpe con el cenicero. La ex novia de Carcaño, de 14 años, presta declaración. Asegura que Francisco Javier la amenazó con rajarla si hablaba. El cuerpo, dice, podría estar en una zanja. Dotaciones de los GEOS buscan el cadáver en una zanja de la zona de Camas, cerca de la vivienda de la novia de Carcaño. Durante dos días la Policía vuelve al río y busca en la orillas por si las corrientes lo hubieran arrastrado. No aparece.

A petición de la familia, la Policía retoma la búsqueda en la zanja de la zona de Camas, pero Marta sigue sin aparecer. Un ciudadano anónimo ofrece un millón de euros a quien de alguna pista, pero no consigue ninguna.

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