Prueba clave del crimen

La revisión de una de las pruebas del crimen de Alcàsser que podría dar la vuelta al caso

Han pasado 28 años desde el crimen de Alcàsser, precisamente por eso una de las acusaciones quiere que se revise una de las pruebas. Se trata del vehículo en el que habrían secuestrado a las jóvenes y que en su momento se analizó sin encontrar restos biológicos pero que con las nuevas técnicas podría aportar pruebas incriminatorias.

Una asociación de criminólogos personados en la causa del crimen de las niñas de Alcàsser ha solicitado al juez que con las nuevas técnicas se vuelva a examinar el coche en que pudieron trasladar a las niñas. Son dos vehículos: un opel corsa y un seat ronda que pertenecían a Miguel Ricart y a Antonio Anglés.

Javier Martínez, periodista de Las Provincias y una de las personas que mejor conocen este caso, señala que esta asociación se ha personado ya en otras causas para revisar crímenes sin resolver y pretenden afianzar la línea acusatoria contra Antonio Anglés en el hipotético caso de que fuera detenido. Su objetivo es encontrar restos biológicos que no pudieron determinarse en ese momento.

En el coche se hallaron 165 pelos, se extrajo ADN de 7 de ellos y no hubo evidencia forense de que las niñas estuvieran allí. Piden que los equipos de la Guardia Civil realicen un segundo examen en busca de nuevas pruebas. Los vehículos se encuentran en el depósito judicial de Chester. Las acusaciones han considerado que es una prueba del delito de rapto.

Puedes volver a ver la nueva prueba que podría dar un giro al caso de las niñas de Alcàsser en Atresplayer.