Sus graves problemas de obesidad le impiden visitar al médico

Ernesto, residente en Tenerife de 55 años de edad, está pasando por muy malos momentos debido a sus problemas de obesidad. Para salir de casa necesita la ayuda de una grúa de los bomberos. Pesa más de 200 kilos y no es capaz de valerse por sí mismo para moverse.

Hace más de un mes tropezó con un adoquín que le destrozó el tobillo. Tuvieron que reconstruírselo con la ayuda de 3 placas de titanio y 11 clavos para poder sujetarle el hueso. Ahora sufre inmovilidad absoluta y tiene problemas hasta para acudir al médico. No pudo llegar a su última cita y tendrá que espera un mes y medio para volver a ir.

Su familia no tiene los recursos necesarios para contratatar a una asistenta que le ayude. Quiere que todo el mundo vea lo mal que lo está pasando y sólo pide "un trato digno".