El testimonio de Andrea, superviviente de la DANA: "Ha sido muy duro prepararse para morir"

La tarde del pasado martes ha pasado tristemente a la historia por los efectos de la DANA que varios días después sigue asolando España. El temporal, el peor de este siglo, ha devastado poblaciones de Cuenca, Albacete, Málaga y Valencia, con mucho la provincia más castigada por las lluvias torrenciales, y donde se ha registrado el mayor numero de víctimas.

Andrea se encontraba en su oficina, en Paiporta, municipio de Valencia, zona cero de la tragedia que deja la DANA. El primer vídeo que grabó fue de cuando en la calle comenzaban a flotar los vehículos. En el portal, un par de centímetros tan sólo, pero la inundación amenazaba con irrumpir en el edificio, cosa que ocurrió momentos después.

"Aun no soy consciente de lo que he vivido"

La joven se estremece al recordar lo que vivió y reconoce estar asimilándolo todavía. Expresa una frase que repiten, agradecidas, muchísimas personas que están dando su testimonio: "Estoy viva".

EL nivel de las aguas seguía subiendo y minutos después de ver que la inundación empezaba a colarse en el local, la fuerza del agua reventó la puerta.

"No veía escapatoria"

El caos irrumpió en su la pequeña oficina, situada en un bajo. Ante la imposibilidad de refugiarse en otro lugar o siquiera poder acceder a un piso superior. Andrea no vio otra opción más que refugiarse en un pequeño cuarto, algo más elevado, y al que se accedía por unas escalerillas.

Cuestión de minutos

Según el relato de la joven, apenas 10 minutos después de ver que en la calle habría unos 30 centímetros de agua, ya se encontró atrapada.

Andrea afirma que, a las 7 horas y 11 minutos de la tarde del martes, cerró todo y fue a refugiarse al cuartito ahí, a las 7:25 horas "ya estaba encerrada. Hasta la una del mediodía que me rescataron unos hombres".

"Salí, vi eso y me quedé a cuadros"

"Estuve sin beber, ni comer, sólo rezando"

Pese a haberse anunciado con varios días de antelación la llegada de la DANA y de importantes lluvias, la joven no era consciente: "Yo ni idea, no tenía ni idea de nada, nada".

Poco después la joven reconocía que la habían rescatado pasada la una de la madrugada, equivocación fruto de los nervios y lo complicado de la situación. después de escuchar voces en la calle y un rato después de comenzar a gritar pidiendo auxilio. Con la ayuda de un palo logró hacer un hueco entre todos los trastos que había acumulado la inundación: "Conseguí abrir un poco la puerta y gritar socorro".

"Me escucharon después de un tiempo gritando y ya consiguieron entrar a rescatarme", explicaba Andrea.

Horas dada por desaparecida

Antes de quedarse sin batería en su teléfono móvil, la joven viendo que no tenía otra opción más que esperar, fue consciente que igual no salía con vida de aquello y grabó un difícil mensaje. Desesperada y entre lágrimas, la joven mandaba un mensaje de despedida dedicado a sus padres: "Vale papá, yo te quiero mucho, sé que voy a salir".

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