Una limpiadora asegura que sustituía a la portera sin contrato enferma de Alzheimer a la que los vecinos dicen que acogieron por caridad

La Comunidad de Madrid ha anunciado que se pondrá en contacto con la familia de Carmen para ofrecerle ayuda: en principio podría cobrar la Renta Mínima de Inserción o la Ayuda a la Dependencia.

Carmen dedicó los últimos 30 años de su vida a trabajar en la portería de la finca de la calle Ferraz 61. Sin embargo, la mujer de 77 años ahora enferma de Alzheimer, no cotizó a la Seguridad Social por lo que ahora no tiene derecho a jubilación.

Los vecinos del inmueble aseguran que cuando murió el marido de Carmen, portero del edificio, dejaron a la mujer quedarse a vivir en la finca pero nunca ejerciendo labores de portera. Sin embargo, los hijos de Carmen aseguran que su madre realizaba las labores propias del trabajador de una portería y que en su casa tenía las llaves de todos los vecinos del inmueble.

Ahora una portera de un inmueble vecino asegura que sustituía a Carmen cuando ésta estaba de vacaciones. Confirma que la mujer realizaba las labores propias de una portería: hacer el portal, recoger el correo, barrer o fregar. "Ha estado trabajando igual que yo, yo hacía su suplencia cuando se iba de vacaciones 15 días", sostiene.