Vivienda

La venta de vivienda se desploma, pero los precios no bajan

Con el precio del euríbor disparado, la compraventa de vivienda marca la cifra más baja en dos años, sumando ya tres meses de descenso.

Por tercer mes consecutivo desciende la compraventa de vivienda. En el pasado mes de abril cayó un 8,1% en relación al mismo mes del año pasado, y en total se firmaron 43.311 operaciones, según datos del Instituto Nacional de Estadística.

Cae especialmente la venta de vivienda usada, que bajó un 9% en abril de 2023, frente a la vivienda nueva, que también desciende pero en menor medida, con una caída del 4,2%. Mientras que el euríbor sigue disparado.

País Vasco, la comunidad en la que más desciende la compraventa

Si analizamos el descenso de la venta por comunidades autónomas, la mayor caída se registra en País Vasco, con un -23,4%, seguida de las Islas Baleares (-19,6%), y La Rioja (-18,6%). Por encima del 10% también caen las comunidades de Galicia, Canarias, Cataluña y Madrid, algo que puede deberse a la subida de la inflación y el euríbor.

El desplome de esta tendencia es multifactorial, pero el motivo principal sería el encarecimiento de la financiación, según Beatriz Toribio, experta inmobiliaria y directa adjunta de Masteos, quien también apunta al contexto económico: "la elevada inflación, la reducción del poder adquisitivo del ciudadano medio, el encarecimiento del coste de los materiales, el contexto geopolítico, etcétera". Toribio asegura, además, que el mercado inmobiliario está resistiendo mejor de lo que se esperaba en un principio en este contexto tan negativo.

Baja la compraventa de viviendas, pero los precios no

Aunque la lógica apuntaría a que los precios de las viviendas descenderían a la par que las operaciones de venta, no es el caso. Toribio afirma que los precios no bajarán porque están resistiendo: "Hemos visto que organismo internacionales están revisando a la baja las previsiones económicas para España". Destaca también el ahorro de los españoles, que aumentó durante la pandemia y que ahora se va a traducir en amortizaciones mediante hipotecas y apuestas por la inversión en vivienda, ha asegurado la experta para Espejo Público.

En suma, el encarecimiento de los costes materiales y de la mano de obra, así como la escasez de esta última hace que el precio final, especialmente en la vivienda nueva, no pueda descender, ya que supondría pérdidas en el mercado inmobiliario.