Mejores momentos | Programa 3

Las corazonadas de Jaume tienen premio: con estas dos afirmaciones ganó 20.000 euros en ¡Salta!

El ‘controller’ de la partida ha llegado hasta la ronda final y ha conseguido el segundo premio del concurso.

Jaume, concursante de ¡Salta!

Publicidad

Jaume ha jugado con el rol de ‘controller’ a la perfección: ha aprovechado los avances que han hecho sus compañeros para ser él el que llegue a la ronda final. Un camino que arrancó bien para Jaume, pero mal para Abel, ya que caía al vacío en la primera fase.

Abel, concursante de ¡Salta!

Seis afirmaciones le esperan en pantalla y Jaume tiene que adivinar las tres que son ciertas, pero no tiene ninguna certeza de saberlas. Por corazonada, el concursante opta por creer que el propietario de Segway murió en un accidente de Segwey... ¡y ha acertado!

Jaume asegura 5.000 euros, pero acertar otra afirmación multiplicaría por cuatro esa cifra. El concursante le da vueltas al resto de afirmaciones, pero Jaume ha venido a jugar: “5.000 no me van a cambiar la vida”.

El concursante pone en la trampilla la afirmación que señala que tanto la sepia como el calamar son mariscos. Al saltar, la trampilla no se abre. ¡Acaba de ganar 20.000 euros! Ahora sí que sí, esta cifra es suficiente para Jaume y decide plantarse, aunque había otra afirmación que le llamaba la atención.

¿Sería la correcta? En caso de jugarla, ¿habría perdido todo su dinero o habría ganado los 50.000 euros de ¡Salta!? ¡Haz clic en el vídeo y no te pierdas este desenlace!

Antena 3» Programas» Salta

Publicidad

Bea y José

Bea recuerda cómo se enamoró de José, el amigo de la infancia de su madre: "Su hija me invitó a dormir y surgió el primer beso"

José tiene 56 años y Bea, 23. Él fue amigo de juventud de la madre de Bea, pero hoy está perdidamente enamorado de su hija. ¡No te lo pierdas!

Antonio Granero

Habla el padre de uno de los menores acusados de homicidio en Badajoz: "Sentí rabia por no haber sido capaz de evitarlo"

Nos visita Antonio Granero, el padre de uno de los tres menores sospechosos de haber matado a una educadora social en Badajoz. Según nos cuenta, su hijo tenía problemas de comportamiento desde hace años, pero, según él, la Administración miró hacia otro lado.