"The Walking Chef" por @norcoreano

Programa de repesca en 'Top Chef' ambientado en Toledo y en el mestizaje de las culturas judía, musulmana y cristiana. Como siempre, la cocina mormona y la de la cienciología, las grandes olvidadas. Los “caídos” del programa tuvieron que preparar una receta con gallina, cous cous y bacalao. Los “vivos” tenían que juzgar el mejor plato, el que repescaría a un concursante, pero lo hicieron ser conscientes de ello.

A los “vivos” les desconcertó mucho que en vez de a cocinar les pusieran a probar platos. A Filippetti se le alteraron los chakras y el olor a cúrcuma le inspiró ciertos matices de repesca. El argentino, sabiendo de qué iba todo, optó por no favorecer a ninguno de sus ex rivales y ofenderlos a todos por igual. No se puede decir que no sea justo. No le gustó ningún plato, al que no le sobraban cítricos le faltaban cítricos. El que no estaba crudo estaba pasado.

Los “vivos” terminaron repescando a Melissa sin saber que iban a tener que reproducir su plato. Filippetti se había concentrado tanto en poner caras de asco que no se dio cuenta de qué plato había probado e hizo lo que haría cualquier persona honesta en su lugar: copiar a los de al lado. Melissa se quedó de espectadora, viendo como Víctor había elogiado su plato sin saberlo, la había repescado para el concurso y se iba a jugar la permanencia en el concurso reproduciendo su plato. A la de Granada sólo le faltó acariciar un gato negro mientras observaba a su archienemigo peruano.

Se fue Manu, uno de los favoritos, pero el momento estrella del programa nos lo dejó otro concursante:

“No utilizo la olla express porque es peligrosa, explota”. (David Marcano, cocinero PROFESIONAL).

Marcano es de los que no friega los platos porque se le estropean las manos. La semana que viene en 'Top Chef': abuelas e hidrógeno líquido, eso sí es una mezcla y no lo de los cítricos con el amargo.