Vive atrapada en casa desde hace 10 años porque los vecinos no quieren poner ascensor: "Estoy decepcionada"

Nuria Rodríguez tiene 44 años y lleva 10 sin poder salir de su casa. En 2014 una operación le provocó síndrome de Sudek, una enfermedad degenerativa que le causa dolor al caminar, además de la pérdida de la masa muscular.

Vive en un cuarto piso sin ascensor y, para bajar, necesita las muletas y ayuda, pero Nuria vive con sus padres, que son mayores y jubilados, lo cual lo hace más difícil. Actualmente sale 1 vez cada 15 días.

Ella ha pedido poner un ascensor, pero los vecinos han asegurado que no pueden enfrentar el gasto de instalarlo. "Si ellos no pueden, los 4 que podemos tendríamos que hacernos cargo de 20.000 cada uno", ha dicho.

Una imposibilidad a la que Nuria suma una gran falta de empatía y que supondrá que supondrá seguir encerrada en su casa.

Ella afronta la situación con ansiedad y, aunque ha dejado claro que acabas acostumbrándote, esa no es forma de vivir. "Estoy un poco decepcionada", ha dicho.

Sus vecinos saben el dolor por el que está pasando, pero aseguran que poner un ascensor tiene un coste muy elevado y no empatizan con ella.

Nati, su madre, también sufre mucho por lo que han hecho los vecinos. "No piensan en el dolor que ella tiene", ha confesado.

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