Escuchamos por primera vez a Daniel Sancho dirigiéndose a Edwin Arrieta en un encuentro clave en Madrid

Daniel Sancho y Edwin Arrieta coincidieron en un restaurante antes de su viaje a Tailandia, en un encuentro clave en la relación entre ellos, que era complicada, como contó otro testigo.

Era diciembre del año 2022 y el colombiano ya hacía vida en Madrid, y estas son las imágenes que lo demuestran, en exclusiva.

El colombiano, vestido con ropa de abrigo, hacía deporte por el parque de El Retiro, posando en Plaza Mayor o tomando un café. En ese momento, además, Edwin Arrieta y Daniel Sancho ya planeaban montar un negocio juntos.

Meses después, en abril, ambos deciden hacer una escapada juntos, sin esconderse. Y en junio, acuden juntos a la inauguración de un restaurante en la capital.

El 7 de julio, el colombiano vuelve a este restaurante donde Sancho está trabajando y lo graba mientras el chef da instrucciones al personal. Sobre la mesa está todo preparado para cocinar las hamburguesas.

Por primera vez, escuchamos a Daniel Sancho dirigiéndose a Edwin Arrieta desde la cocina del local.

Desde la capital el cirujano volvió a Colombia, viajó a Chile por trabajo, y desde allí cogió un vuelo hacia Tailandia, donde Daniel Sancho lo asesinó y descuartizó en la villa donde se iban a quedar, como vimos en la reconstrucción de los hechos.

Además, en 'Y ahora Sonsoles' hemos hablado con un testimonio clave en el caso. Se trata de Viviana, la mejor amiga de Edwin que habló con Sancho apenas unas horas después del crimen, cuando él estaba en comisaría.

Ella nunca imaginó que estaba hablando con el que asesino confeso de su amigo. Un testimonio muy similar al de la amiga que hizo el chef en Tailandia, justo la noche en la que cometió el asesinato.

La joven con la que pasó el día tampoco pensó que Sancho acabase de matar a una persona, pues se mostró muy tranquilo. Ella también contactó con él cuando estaba en comisaría, y él le dijo que estaba bien, pero que su vida se había acabado.

¿Cómo ocurrió el crimen?

Después de una discusión, Sancho acabó presuntamente con la vida de Edwin Arrieta tras golpearle en la cabeza.

Posteriormente lo descuartizó y lo metió en una nevera, que se derrumbó al ver durante la reconstrucción, para después deshacerse de las partes en el mar y el vertedero de Koh Samui.

Sancho confesó los hechos y ahora permanece en prisión provisional hasta que tenga lugar el juicio, que no será, como mínimo, hasta dentro de dos meses, como nos explicó uno de los jueces del caso.