Nos lo cuenta
La gigantomastia hace que los pechos de Beatriz nunca dejen de crecer: "En el colegio me sexualizaban"
Con 12 años, Beatriz ya tenía una copa C de pecho. Cada uno llegó a pesarle 5 kilos y su vida estaba completamente condicionada por ello. El motivo: padecía gigantomastia.

Publicidad
Beatriz siempre ha estado atrapada en su propio cuerpo. Con 12 años, sus pechos comenzaron a crecer descontroladamente debido a su gigantomastia, que hizo que cada uno llegara a pesarle 5 kilos.
Todo empeoró cuando se queda embarazada con 17 años. Comienzan los dolores de espalda y su tamaño se duplica. "Nadie me decía nada de que mi pecho fuera creciendo y creciendo", señala.
Con la segunda hija de Beatriz, la historia se repite. Sus pechos no dejan de crecer y ella se ve obligada a paralizar su vida.
Desesperada, Beatriz ha recurrido a la cirugía para quitarse dos kilos de cada pecho. Aunque su vida ha mejorado notablemente, sigue viviendo con el miedo de que vuelvan a crecer.
Publicidad