Las hijas de Marisa Medina y Alfonso Santisteban: "Que en el mismo año se murieran los dos fue muy duro"

Hace 13 años, fallecía Marisa Medina, la presentadora que conquistó nuestras pantallas casi al mismo tiempo que llegó la televisión. Es de las pioneras de la pequeña pantalla y la locutora de continuidad más popular de la época.

Hoy, nos visitan sus hijas Laura y Silvia, que conocieron a la verdadera Marisa, más allá de la televisión. "Hemos vivido con mucha naturalidad la fama de nuestros padres", nos cuentan.

La presentadora se hizo tan popular durante los años 70, que le ofrecieron probar suerte en el cine y en la música. Sin embargo, el mundo de la televisión nunca le perdonó su transgresora actitud, que le llevó a aparecer semidesnuda en Satán Azul o a posar en una portada de Interviú. "Lejos de ser una provocación, fue algo inspirador y necesario", señala Laura.

Desde aquel momento, los productores dejaron de llamarla para ofrecerle programas de televisión. Aquello se juntó con el divorcio de su marido, Alfonso Santisteban, que fue el inicio de su fin.

A raíz de la separación y su declive profesional, Marisa cayó en un bucle de adicción al juego y a la cocaína. Sin embargo, gracias a la ayuda de su familia y, en especial, de sus hijas, logró salir.

La batalla que no pudo vencer fue la del cáncer, que la acompañó hasta el final de sus días. "La enfermedad de mi madre la vivimos muy mal", confiesan sus hijas, "que en el mismo año se murieran nuestro padre y nuestra madre fue muy duro".

Hoy, Marisa continúa viva en el recuerdo de sus hijas, que siguen pensándola como la estrella que un día fue. ¡Dale al play para escucharlas!