Eran amigas íntimas

Malvive en una infravivienda porque la cuidadora de su madre ha okupado su casa: "Le he rogado que me la devuelva"

Dolores confió en ella para cuidar a su madre y, cuando falleció, su vivienda. Sin embargo, cuando volvió se encontró con unas ventanas llenas de rejas y una llave que no abría la puerta. Su amiga le había okupado la casa y se resiste a dejarla.

Eran amigas inseparables, tanto que Marisol se convirtió en la cuidadora de la madre de Dolores, algo que hizo para ayudarla económicamente. Y no solo eso, sino que fue alguien tan importante que, cuando falleció la anciana, a pesar de ser solo la cuidadora, aparece en la lápida.

Dolores estaba devastada por la muerte de su madre, por lo que decidió irse un tiempo a casa de otro familiar con la promesa de que Marisol cuidaría de su vivienda.

Sin embargo, nunca imaginó lo que se encontraría al regresar, pues de hecho no se fue más de una semana. Las ventanas de la casa estaban llenas de rejas y la llave no abría la puerta. "Cuando llegué empezó a gritarme desde dentro", ha explicado.

Y es que Marisol le había robado su vivienda y todo lo que había dentro, algo que Dolores denunció y, a pesar de que el juez le dio la razón, la que fue su amiga se resiste y continúa okupando la casa. Ella alega situación de vulnerabilidad, algo que se le ha desestimado en varias ocasiones.

La fecha decretada para echarla era el pasado 28 de julio, pero Marisol consiguió paralizar el desalojo.

Sin embargo, Dolores no se rindió y siguió luchando por su vivienda. De nuevo el juzgado le ha dado la razón pero la sentencia no se ha llegado a ejecutar nunca.

Un conocido de la okupa asegura que ella se dedica a decir que la casa está a su nombre, incluso enseñando una documentación que, según Dolores, es falsa. "Dijo que yo le había alquilado la casa, pero no hay contrato", ha contado, además de que esas viviendas no se pueden alquilar.

Ahora, por culpa de la cuidadora okupa, ella malvive desde hace 4 años en una infravivienda con todo tipo de basura.

Dolores ha intentado hablar con ella e incluso le ha rogado que le devuelva su hogar. Esta no es la primera vez que Marisol okupa, sino que ya es la tercera.

Hablamos con la okupa

Pepa Romero ha hablado con Marisol, la okupa, que ha asegurado que no tiene nada que decir. "Las cosas están donde tienen que están", ha dejado claro.