El organizador de la fiesta clandestina que ha acabado en crimen en Estepona: "Me reconozco como un criminal"

A primera hora de la mañana, los vecinos de una urbanización localizada entre Marbella y Estepona se han despertado por unos disparos que han acabado con la vida de un hombre, que presentaba una herida por arma de fuego a la altura de la espalda.

Ha ocurrido en una mansión en la que se celebraban fiestas clandestinas y en cuyas imágenes del registro policial ha aparecido un viejo conocido de los agentes. Se trata de León, uno de los supuestos promotores de estas fiestas.

Los vecinos llevaban meses vigilando el trasiego del chalet e incluso han denunciado en varias ocasiones este negocio ilícito. Y es que las fiestas que tenían lugar en el chalet se celebraban hasta el amanecer en el sótano de la vivienda.

Esta zona residencial de lujo ha acabado convirtiéndose, por tanto, en el punto de encuentro de aquellos que alargan la noche y quieren más fiesta. Los vecinos, además, denuncian que a esta mansión llega la droga.

En Y ahora Sonsoles hemos podido hablar con León, el supuesto promotor de estas fiestas. Ha asegurado que son fiestas privadas de amigos y que tiene una discoteca en casa para no tener que salir.

"Le llamo discoteca por decir un nombre pero es mi salón", ha dicho. El supuesto asesino, ha contado, estaba sentados en un sofá cuando ocurrieron los hechos. "Pensaba que era un globo", ha asegurado, pero en realidad era un disparo.

Entonces León salió a la calle, ha contado, y todo el mundo salió corriendo también. "Lo encontré muriendo en el suelo", ha dicho, y ha dejado claro que él no vio nada y que no sabe quién fue.

León se ha reconocido, por otra parte, como un criminal pero que no comete delitos graves. "Soy un hombre de fiesta", ha asegurado.

La denuncia de los vecinos

También Diego, presidente de la comunidad y el único vecino que ha querido hablar, nos ha atendido en directo por un problema que lleva ocurriendo dos años. Se quejan del ruido, pero sobre todo de las personas que pasan por la zona. "Temían que iba a ocurrir y ha ocurrido", ha dicho.

Muchos vecinos, ha contado Diego, se plantean vender sus viviendas porque no soportan la situación. "Son villas muy caras, el chalet de la fiesta está valorado en 3 millones de euros", ha afirmado.

Los residentes están horrorizados y por ese motivo no han querido hablar en directo. A pesar de que Diego ha ido a la policía a denunciarlo, no hacen nada y él se siente impotente. "Es un calvario", ha confesado.

Hace unos meses, unos vecinos de Marbella denunciaron en nuestro programa que habían aumentado los episodios violentos en la ciudad.