Nos visita en plató
Teresa Rabal vuelve al cine con el mismo brillo en sus ojos que hace 40 años: "Yo ante todo soy actriz"
Lleva toda una vida dedicándose al espectáculo, desborda talento por los cuatro costados y 40 años después de dejar al cine, vuelve a hacer un papel en la película ‘Tin y Tina’, donde encarna a una monja terrorífica.
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Teresa Rabal es historia de este país ya que marcó la infancia de toda una generación. En España ha vendido más de siete millones de discos para niños. ¡Nadie ha conseguido superarla!
Sin embargo, mucho antes de ser una estrella infantil, Teresa Rabal trabajó en el cine como actriz, oficio en el que debutó cuando solo tenía 9 años. Lo hizo por todo lo alto, porque su primera película fue dirigida por Luis Buñuel.
Teresa es hija de dos grandes actores de nuestro país: Paco Rabal y Asunción Balaguer, por lo que su vida transcurrió entre artistas. En su casa hay grabados de Picasso, dibujos de Buñuel o poemas de Rafael Alberti.
"Yo ante todo soy actriz"
Su padre no era nada estricto con ella y no le daba consejos, excepto uno: "Sé buena compañera de tus compañeros". Eso sí, sus padres fueron los que se lo enseñaron todo.
Su madre, por ejemplo, era la que le pasaba los papeles cuando ensayaba, algo que hizo hasta mayor. "Mejores maestros no he podido tener", ha contado.
Sin embargo, hace 40 años decidió cambiar el cine por el circo para construir una carrera al lado de su marido, el compositor Eduardo Rodrigo, que falleció en 2017. Algo que fue duro, pero que ha superado y ahora está feliz. "No me permito estar mal porque lo que tengo que hacer es agradecer a la vida", ha asegurado.
Incluso cuando tuvo cáncer en los últimos años de su marido, no lo consideró lo más importante porque su madre y su marido no estaban bien. "Llegaba a la quimio con una sonrisa de oreja a oreja", ha confesado.
Ahora regresa a la gran pantalla con el papel de una monja monstruosa en ‘Tin y Tina’, una película de terror ambientada en los años 80, y de la que ya nos habló en el programa.
Lo dejó porque tuvo éxito en los programas de niños, y, aunque está muy agradecida, tenía muchas ganas de volver a sus raíces como actriz. Su experiencia en su vuelta ha sido una maravilla. "Era como una niña con zapatos nuevos, llegaba feliz después de rodar", ha asegurado.
Y aunque es cierto que a partir de cierta edad muchas actrices ya no son llamadas, el cine es contar historias de la vida y tiene que haber actores de todas las generaciones, ha explicado. "Yo ante todo soy actriz, en mi casa no se hablaba de nada que no fuese el cine y el teatro", ha confesado.
Uno de sus programas más importantes fue "La guardería", donde la actriz aprendió mucho. Incluso se ha emocionado al ver a su padre, Paco Rabal, en unas imágenes.
A pesar de haber hecho de todo, tiene muchos sueños por cumplir. "Mi sueño es seguir en la tele y en el cine", ha asegurado.
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