Disponer de un colchón financiero nos aporta tranquilidad en lo que respecta al futuro. Con ese colchón podemos plantearnos invertir parte de nuestros ahorros, es decir, sacar partido a nuestro dinero, bien a través de inversiones en inmuebles como, por ejemplo, una vivienda o una plaza de garaje, o bien a través de activos financieros como fondos de inversión o acciones, entre otras opciones.
El tiempo pasado es mejor. Eso es lo que piensan los baby boomers (nacieron entre 1957 y 1977) desde el punto de vista económico. Según una encuesta sobre pensiones y hábitos de ahorro elaborada por el Instituto BBVA de Pensiones, siete de cada diez baby boomers consideran que la vida de los jubilados de su generación será peor que la de aquellos que actualmente están en edad de jubilación (cabe destacar que un 75% piensa que su vida hasta ahora ha sido mejor que la de sus padres y el 69% de los que tiene hijos cree que, hasta el momento, sus hijos han podido disfrutar de una vida mejor de la que tuvieron ellos con la misma edad). Además, uno de cada dos baby boomers (53%) dice carecer de ahorros para su jubilación.
BBVA ofrece la opción de hacer un seguimiento de lo que uno ha invertido para estar informado en todo momento de cómo evoluciona su valor
Vivimos en una época en la que la inestabilidad laboral forma parte del día a día de muchos, por lo que la importancia de conocer al detalle lo que tenemos y hasta dónde podemos gastar cobra más fuerza si cabe en estos tiempos.
A lo largo de nuestra vida son numerosos los deseos que queremos poner en marcha: la compra de una vivienda, cambiar de coche, invertir en una segunda propiedad en la que pasar nuestras vacaciones, pagar los estudios de nuestros hijos…
Todos esos objetivos requieren de una inversión considerable, de ahí que si desde el primer momento cuidamos la gestión de nuestra economía, nos resultará más fácil llevarlos a cabo.
No hace falta ser un experto
Cualquiera puede obtener rentabilidad por su dinero en función de sus posibilidades. Quizás algunos asocian la palabra inversión a gente con un elevado poder adquisitivo, pero nada más lejos de la realidad.
Para invertir no hace falta ser un experto en finanzas. Basta con saber dónde está nuestro límite, es decir, saber cuánto dinero podemos dedicar a la inversión sin poner en peligro nuestra salud financiera, además de llevar un control de nuestro dinero gracias a una buena orientación.
Encontrar la inversión que se adapte a nosotros
BBVA, a través de su aplicación, ayuda al cliente a encontrar la inversión que mejor se adapta a él.
Además, le ofrece la opción de hacer un seguimiento de lo que ha invertido para estar informado en todo momento de cómo evoluciona su valor y conseguir así los objetivos marcados.
Mirar al futuro puede suscitar temor. Sin embargo, también se puede ver como un reto apasionante: una etapa en la que es posible cumplir metas si se dan los pasos en la dirección adecuada.