Pese a los beneficios futuros que puede proporcionar invertir, mucha gente no se anima a dar el paso. Y eso que no es necesario que seamos expertos para ello. Lo dice Álvaro Manteca, responsable de estrategias de inversión de BBVA, quien además señala algunas posibles causas por las que en España invertimos menos en acciones, planes de pensiones y fondos de inversión que en otros países de nuestro entorno. La primera de ellas, explica, es que “en España solemos tener vivienda en propiedad, que también es una inversión. En segundo lugar, la falta de cultura financiera. La educación financiera tendría que potenciarse desde los primeros ciclos de la educación. Por último, es probable que afecte la buena rentabilidad que han tenido históricamente los depósitos y que ahora ya no existe».
A la hora de invertir, Manteca asegura que «tenemos que tener en cuenta tres mandamientos básicos. El primero es diversificar: no poner todos los huevos en la misma cesta. En segundo lugar, tenemos que mantener una cierta disciplina emocional, ya que el miedo es el peor enemigo de los inversores». En tercer y último lugar, «comprometernos con el largo plazo. Esto nos va a servir para sacar un rendimiento adecuado a nuestras inversiones. En el corto plazo los mercados financieros se mueven mucho, pero en el largo la tendencia es mucho más sólida. Por tanto, si tenemos un horizonte de inversión de largo plazo podemos recuperarnos de las caídas iniciales y tendremos más seguridad de tener un rendimiento adecuado».
«Tenemos alternativas con las que, por muy poco dinero, podemos hacer que nuestro ahorro empiece a trabajar en el mundo de la inversión»
Según nuestro experto, «todo el mundo puede invertir teniendo en cuenta estos tres mandamientos. Se ha democratizado mucho el mundo de la inversión y ahora mismo tenemos alternativas con las que, por muy poco dinero, podemos hacer que nuestro ahorro empiece a trabajar en el mundo de la inversión».