Momentos capítulo 2.418

La advertencia de Pelayo a Emilio sobre las drogas: “Has abierto una puerta que si la cruzas te llevará al abismo”

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El dueño de El Asturiano busca la forma de ayudar a su amigo.

Emilio lleva mucho tiempo con una actitud extraña y muy nervioso. Manolita empezó a sospechar que a su compañero de Garlo algo le ocurría, pero su forma de actuar queda patente cuando entra a El Asturiano.

El dependiente de las tiendas Garlo parece que no está en un buen momento, se excusa en que busca desesperadamente sus vitaminas ante la sorpresa de Pelayo.

El dueño de El Asturiano saca el bote que Emilio buscaba con nerviosismo de su bolsillo y se lo entrega vacío. “He tirado el contenido al retrete”, le confiesa Pelayo.

“Yo no soy un experto, pero ese bote no tenía vitaminas” le confiesa el tabernero. Ante esa frase, Emilio se pone a la defensiva, “yo estoy perfectamente”.

Pelayo le hace una advertencia a Emilio sobre los efectos de las drogas, “en ese bote hay un monstruo que te va a devorar por dentro poco a poco sin que te des cuenta”. El dueño de El Asturiano intenta buscar que su amigo reflexione explicándole su propia experiencia con su nieta Marisol.

“Mi nieta dejó de ser ella misma cuando le entregó las riendas de su alma a la droga”, el camarero le pide a Emilio que se baje de ese tren e intente encontrar porque está en ese pozo tan negro.

El dependiente de Garlo se enfada con el sermón de Pelayo y sale enfadado del bar pidiendo que le dejen en paz.

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