Ante la claridad con la que ha sido amenazado, y sabiendo que ya no hay nadie que se crea su pantomima de amoroso esposo, Eliseo se comporta sin pudor en el pueblo, hasta el punto de que Emilia se ve en la necesidad de echarle de la Posada.
Sol confirma a Severo y Carmelo que Lucas no sabe nada. Se disponen a tender la trampa a Eliseo.
Aconsejados por Emilia, los Mella se encuentran con Aurora en el Jaral: quieren comprar la casa.
A pesar de los esfuerzos de Ramiro por cubrir las ausencias de su hermano, Rosario empieza a sospechar de la actitud de Alfonso.
La demanda de Aurora por la custodia de Beltrán fracasa: ha perdido a su sobrino. Cuando empieza a plantearse cómo hacer para llevárselo, aunque sea acudiendo al rapto, aparece su abuela en el Jaral.