Los momentos de Puente Viejo: el gran temor de Alicia y el interminable sollozo de Marta

Francisca recibía la noticia de que muy pronto La Casona quedará en venta y la señora no ha podido evitar recordar algunos de los momentos más especiales vividos en ese lugar. Ahora que está a punto de volver a vivir en ese lugar, Francisca siente que por fin podrá ser ella misma e informar a todos los habitantes de que ha regresado al pueblo.

Marta, después de encontrarse con Adolfo de los Visos a orillas del río, regresa a casa y decide contarle a Manuela todo lo ocurrido. La joven se ha convertido en un mar de lágrimas y no puede imaginarse su vida sin que Adolfo esté a su lado. Manuela, que se augura lo peor después de lo que ha pasado, intenta reconfortarla y ayudarla a salir de esa difícil situación.

Pronto llega Rosa para saber lo que ha ocurrido en la entrega de la carta que informaba a Adolfo de una noticia que lo cambiaría todo. Marta no tiene más remedio que mentirle a su hermana e informarla de que su relación con el joven se ha terminado para siempre.

Alicia esperaba a Matías en su lugar secreto para saber cómo le había ido el viaje en el que debía entregar las armas a unos de sus hombres. La tardanza de Matías hizo que la joven se lanzase a sus brazos nada más verle aparecer por la puerta. Matías traía malas nuevas y es que el joven ha sido perseguido por la Guardia Civil. ¿Estarán en peligro? ¿Los habrán descubierto?

Rosa sabe que su hermana no le está diciendo toda la verdad de lo que ocurrió con Adolfo. La joven parece dispuesta a saltarse las normas impuestas por su padre y visitar a su amado en casa para saber toda la verdad. ¿Cómo evitará Marta que su hermana descubra lo que ha ocurrido? ¿Logrará pararle los pies?