Safiye vuelve a abrir viejas heridas del pasado que creía olvidadas: “Murió por mi culpa”

Safiye ha decidido no regalarle los patucos que le había hecho al bebé de Gülben porque no quiere que su futuro sobrino tiene mala suerte al creer que está maldita.

La doctora le dice que no diga esas cosas y entonces la joven le confiesa algo que ha estado guardando todo este tiempo: “Yo lo maté”.

La doctora, muy sorprendida, le dice que a que se refiere y ella le dice que está hablando de sus hermanos.

Entonces la doctora le dice que sus hermanos están vivos y Safiye le responde que no todos.

Safiye le empieza a contar su relato y le cuenta que Neriman tenía una hermana gemela: Umut, pero que el bebé murió cuando ella lo estaba cuidando y por eso se siente responsable: “Fue mi culpa porque me quedé dormida. Es mi maldición”.

“Si hubiera vivido sería igual que Neriman”, dice Safiye, sin poder imaginar que su hermana pequeña estaba escuchándolo todo detrás de la puerta.

¿Cómo reaccionará Neriman ante lo que acaba de descubrir?

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