Bahar se da cuenta del secreto de las cacerolas: ¡son traficantes!

Bahar y Ceyda han vivido una experiencia rocambolesca de la que, en principio, parecen salir indemnes a pesar del susto. Han escapado de la redada de la Policía gracias a una vecina con muy mala memoria que las ha confundido por dos familiares.

Sin embargo, aún están muy dentro del negocio fraudulento de Bersan. Volviendo a casa, Bahar se da cuenta de que todo el cuidado que Cem pedía por las cacerolas tenía un motivo: ahí transportaba algo muy valioso. Eso significa además… ¡que ellas se han convertido en traficantes!

Para colmo, Ceyda se da cuenta de que se han dejado olvidadas las cacerolas en casa de la vecina. Tendrán que regresar a por ellas.