Ceylin y Osman ayudan a Özge a deshacerse del cadáver del asesino de Ridvan

Ridvan, el que era la mano derecha de Pars, ha sido asesinado por la mafia balcánica y Özge, su prometida, ha decidido tomarse la justicia por su mano.

La mujer coge una pistola del despacho de Derya y va a por él después de interceptar un sobre en el despacho de Pars con la identidad del asesino y el lugar donde podían encontrarlo.

Tras un fuerte forcejeo con Kesic, el asesino, la mujer saca una pistola del bolso y le dispara por detrás. ¡El asesino ha muerto!

Özge, se siente culpable y está dispuesta a confesarle todo a Pars cuando Ceylin le dice que se tranquilice y que le cuente qué es lo que ha pasado.

La prometida de Ridvan le acaba confesando a la abogada el crimen que ha cometido y le pide, desesperada, ayuda porque cree que la mafia va a ir ahora a por ella y por su familia cuando descubran lo que ha hecho a Kesic ya que es el hijo del jefe de la mafia.

Ceylin decide ayudarla y le pide a Osman que les eche una mano: “Se trata de algo peligroso y secreto”. Él acepta y juntos entierran el cadáver del asesino de Ridvan en el hueco que iba destinado a otro fallecido en el cementerio. ¿Descubrirá la policía lo que acaban de hacer y que ahora también sus manos están machadas de sangre?