Damián, muy grave, decide cambiar su testamento: ¡Reparte la empresa entre sus tres hijos a partes iguales!

Damián de la Reina está en un estado crítico, tras el accidente de la fábrica su salud parece no mejorar. Aunque Evaristo y Luz le han atendido, su vida está muy delicada. Por ello, ha pedido una última confesión con Don Agustín: el cura de la colonia.

El patriarca le ha confesado al cura que tiene muchos pecados en su haber y secretos muy oscuros. ¡Y él le ha animado a que lo confiese todo!

Temiendo por su vida y el destino de su empresa si él se va, Damián ha decidido cambiar su testamento y dejarles la empresa a sus tres hijos por partes iguales. Sin importar que Jesús lleve años al cargo de ella, quiere que todos tengan el mismo porcentaje de acciones.

Cuando se han enterado sus hijos, se han quedado sorprendidos con la nueva decisión de su padre. “Esto es lo más justo para todos”, ha defendido Don Damián. Jesús se ha enfadado mucho al conocer que le han quitado poder de la empresa. ¡Él lleva años al frente de ella!

“Has ninguneado a tu hermana Marta durante todo este tiempo”, le ha regañado Damián. El patriarca ha explicado que lo más importante es la empresa y que persista el negocio familiar, y para ello quiere que las decisiones se consensuen entre sus tres hijos, no solo en Jesús.

¿Sobrevivirá Damián? ¿Qué pasará si finalmente muere y la empresa queda en manos de los tres? ¿Qué hará Jesús?