Capítulo 20
Halis pone fin al conflicto con Serter tras un tenso cara a cara: “Si quisiera, habría derribado a toda tu familia”
La dignidad y la sabiduría del hombre han conseguido, una vez más, encontrar una solución donde antes solo había enfrentamiento.
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Los Korhan se han presentado en la mansión de Serter. Halis, al ver al joven, le ha preguntado si no tiene modales, dado que no le ha besado la mano.
La situación se ha intensificado cuando uno de los hombres de Serter ha intervenido de manera insolente, diciendo que no se merecía ese gesto. Sin dudarlo, el abuelo de Ferit le ha respondido con un bofetón que ha resonado en toda la sala, dejando clara su autoridad.
Para calmar los ánimos, Serter ha tomado la iniciativa y ha besado la mano del patriarca, intentando evitar que la situación escalara aún más.
Más tarde, en privado, han tenido una conversación que ha cambiado el rumbo del conflicto. Tal y como le ha dicho Halis, su futuro depende de su educación y dignidad. "Si quisiera, habría derribado a toda tu familia", le ha advertido.
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Serter, arrepentido, se ha disculpado por todo lo sucedido. Luego, Halis se ha quedado a solas con el joven, y finalmente, ambos han llegado a un acuerdo. Ahora, Pelin y Ferit pueden estar tranquilos: Serter no volverá a acercarse a ninguno.
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