Capítulo 27
"No hay poder en la tierra que me haga volver": Seyran le cuelga el teléfono a Halis y rompe con todo
Tras una fuerte discusión con Ferit, Seyran ha decidido irse de la mansión, una decisión que ha provocado la ira de Halis.
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Mientras hablaba en el despacho con Orhan y Kazim, Halis ha estallado al enterarse de que Seyran se ha ido de la casa otra vez. Para él, el matrimonio no es un juego y ella está actuando con desobediencia.
Decidido a tomar el control de la situación, Halis la ha llamado para ordenarle que esté de vuelta para la cena. Pero Seyran, firme en su postura, se ha negado. "Ferit me ha levantado la mano y no puedo consentirlo", ha defendido.
Molesto como pocas veces, el patriarca de los Korhan le ha recordado que le ha dado privilegios que nadie más tiene y que, cuando él da una orden, se cumple. Pero Seyran no ha cedido. Respetándolo, le ha dejado claro que no hay poder en la tierra que la obligue a regresar. Y con esas palabras, le ha colgado el teléfono.
En su despacho, fuera de sí, ha descargado toda su rabia contra Kazim, responsabilizándolo por la actitud de su hija. Pero su advertencia ha sido clara: "Esta noche, Seyran estará sentada en la mesa... o habrá consecuencias".
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