Si se lograse que el 50% de los recién nacidos se nutriesen exclusivamente hasta los seis meses de la leche materna, se podría salvar la vida a 823.000 niños y a 20.000 mujeres cada año, y se podrían ahorrar más de 300.000 millones de dólares anuales, según instituciones internacionales. Estas son algunas de las conclusiones incluidas en un estudio efectuado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), Unicef y la ONG Global Breastfeeding Collective, que se presentó este martes al dar comienzo la Semana Mundial sobre Lactancia Materna.
El informe reconoce que ningún país en el mundo cumple con los estándares recomendados por la OMS y Unicef sobre lactancia materna, y que solo algunos lo hacen de forma parcial. La principal recomendación es que los recién nacidos se alimenten exclusivamente de leche materna hasta los seis meses.
El informe revela que de 194 naciones estudiadas, sólo 23 tienen tasas de lactancia exclusiva hasta los seis meses de más de un 60% y que sólo el 40% de los niños de 24 semanas se amamantan de forma exclusiva.
En 2012 se estableció el objetivo de que antes de 2025 el 50% de los niños de menos de seis meses se alimenten exclusivamente con la leche de su madre. Para ello, es necesaria una inversión de 4,70 dólares por recién nacido, según el estudio, que revela que, si el objetivo se lograse, se podría salvar la vida anualmente a 823.000 niños de menos de cinco años y de 20.000 mujeres.
Adicionalmente, se podría ahorrar hasta 300.000 millones de dólares gracias a la reducción del gasto sanitario, porque el nivel de enfermedades caería y crecería la productividad. "La lactancia materna es una de las inversiones más efectivas que existen. Incrementa la salud de las madres y de los niños de forma clara, por lo que se reduce drásticamente el gasto sanitario porque crecen niños sanos que contribuirán al desarrollo del país", afirmó en una teleconferencia la directora ejecutiva de la ONG 1000 días, Lucy Sullivan, que participó en el informe.
"Hay cientos de estudios que demuestran y confirman la causalidad directa entre la lactancia materna y la salud de madres y niños", afirmó a su vez el experto en Nutrición, Salud y Desarrollo de la OMS, Laurence Grummer-Strawn. Así, el estudio indica que la lactancia podría evitar hasta 20.000 casos de muertes por cáncer de mama.
Además, recuerda que la lactancia materna está relacionada con un aumento de entre 3 y 4 puntos en el coeficiente intelectual y que reduce el riesgo de contraer enfermedades no transmisibles, además de rebajar el riesgo de obesidad. Específicamente, el estudio subraya que casi la mitad de los casos de diarrea y un tercio de las infecciones respiratorias serían evitadas si aumentaran los índices de lactancia en los países de bajos y medios ingresos.
La diarrea y la neumonía son las dos principales causa de muerte entre los menores de cinco años. No obstante, millones de mujeres en el mundo no amamantan porque son influenciadas por la publicidad que hacen las empresas alimentarias de sus productos de leche de substitución. "Millones de mujeres en el mundo son engañadas por los productos de leche de sustitución, llamados fórmula", aseguró la asesora sénior para Nutrición de Niños y Jóvenes en Unicef, France Begin.
Es por ello que el informe insta a los países a aplicar el Código de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna que la Asamblea Mundial de la Salud adoptó en 1981 y que hasta la fecha solo implementan efectivamente 39 de los 194 países miembros. Éste aboga por dar prioridad a la prevención de la malnutrición en los lactantes y en los niños de corta edad mediante el apoyo y la promoción de la lactancia natural, medidas legislativas y sociales que faciliten a las trabajadoras la lactancia natural, y la regulación de la promoción indebida de la venta de alimentos infantiles que puedan utilizarse en lugar de la leche materna.
El informe aboga, además, por que las naciones apliquen la recomendación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y otorguen licencias de maternidad de 18 semanas con 100% del salario a todas las mujeres para promover la lactancia materna. Adicionalmente, insta a las empresas a crear espacios para que las mujeres que lo deseen puedan extraerse la leche que posteriormente darán a sus hijos al reencontrase con ellos al terminar la jornada laboral.